¿Existen límites en la comunicación audiovisual? Esta es la
pregunta que nos hacemos tras leer este texto llamado “Testimonios” en el que
Iratxe, una redactora termina en prisión después de que un participante de su
programa matase a su hermana a golpes por llevarle al programa y acabar con su reputación.
Todo comienza cuando a esta redactora llamada Iratxe, la cual
trabaja en un programa de testimonios , le falta una historia para completar el
programa del siguiente día. Es tarde y sus ganas de trabajar van en disminuyendo
a medida que cae la noche. Entonces se acuerda de una muchacha que llamó hace
unos días llamada Saray. Sin embargo, ella no sirve por si sola , no es
problema de ella si no del formato del programa que exige perfiles muy
concretos.
Decide llamar a Saray y preguntarle a ver si tiene problemas con alguien y quiere
decirle que ya basta en directo. Entre las dos , más por la incitación de
Iratxe que por los verdaderos problemas de Saray deciden llevar a su hermano
diciéndole que le quieren entrevistar por lo buen graffitero que es. El final , ya lo hemos contado.
La cuestión es que condiciones debe tener en cuenta un redactor,
un periodista, un reportero… para lograr su objetivo? Deben de existir ciertos
limites morales para su consecución.
Al igual que sucedió con
aquella imagen que logro muchos éxitos en la que podíamos ver a un niño
desnutrido al lado de un buitre, o esos reporteros de guerra que no hacen nada
ante los asesinatos sin razón de niños indefensos. Quizás en este caso, en un primer momento no
se podía ver lo que iba a suceder, pero no debemos de esperar al problema para hallar
la solución.
Debemos de ser conscientes de las consecuencias que puede
acarrear, o como pueden reaccionar las personas a las que comprometemos con
nuestros actos. A partir de ese análisis podremos trabajar de una forma mucho
más ética y que nos traerá menos problemas y más horas de sueño.
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